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08/06/2012 / Casa Amèrica Catalunya

Casa Amèrica Catalunya acoge una conferencia sobre la importancia de la ciudadela del Chan Chan

Los arqueólogos peruanos e investigadores del Instituto de los Andes Hugo Navarro Santander y Pedro Ibérico Portocarrero han pronunciado en Casa Amèrica Catalunya la conferencia Chan Chan Patrimonio Cultural de la Humanidad: evidencias e interpretaciones, sobre la importancia del conjunto arqueológico que constituye la ciudadela prehispánica de adobe más grande del mundo. Ha presentado el acto el cónsul general de Perú en Barcelona, Pedro Matallana, junto a Jaume Morera, responsable de arqueología del Centre Muntanyenc i de Recerques d’Olesa de Montserrat.

Los ponentes han explicado las consecuencias derivadas de la condición de Chan Chan como capital del reino Chimor, la influencia del cual se extendió por el Perú entre los siglos XI y XV, cuando fue sometido por el Imperio Inca. Chan Chan significaría, en el idioma chimú, Sol resplandeciente, debido a las altas temperaturas que debía soportar la ciudadela.

El cónsul de Perú ha calificado la cultura Chimor de ”fascinante”, y ha destacado algunas de sus herencias. Como por ejemplo la canalización de los recursos hidráulicos, que facilitaron el desarrollo agrícola, o bien las técnicas de recogida de agua o los trabajos de destileria. En otros ámbitos, la población de Chan Chan creó una arquitectura de distribución polifuncional, mientras que en la artesanía demostró gran habilidad en la cerámica o los tejidos.

La cultura chimor influenció toda la costa norte del Perú. Hoy tenemos veinte kilómetros de ciudadela de adobe, la más grande y bien conservada del mundo, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1986 y también Patrimonio Mundial en Peligro por el mismo organismo de las Naciones Unidas. Diversas son las amenazas al Chan Chan, desde los fenómenos meteorológicos hasta las dificultades económicas.

Este acto ha sido organizado por el Instituto de los Andes y el Consulado General del Perú en Barcelona, con la colaboración de Casa Amèrica Catalunya y el Centro Montañoso y de Búsquedas de Olesa de Montserrat.